Balance General: ¿Qué es y cómo hacerlo?
El Balance General no es solo un papel más en la oficina o un mero trámite contable que nos exige la muni o el bendito SII. Es el reflejo de cómo va tu pyme o emprendimiento, mostrándote el panorama claro de tu negocio. Como buen chileno, sabemos que a veces queremos ir al tiro al grano, y este documento nos ayuda justamente a eso: ver en qué estamos parados financieramente. Si sientes que estás un poco perdido con el tema, no te preocupes, porque en este artículo te vamos a aclarar la película. Vamos a desmenuzar el Balance General para que lo tengas clarito. Así que, si estás con la camiseta puesta por tu negocio y quieres manejarlo con maestría, quédate con nosotros en este viaje ✈️.
Contenido
¿Qué es el Balance General?
El balance general es una herramienta fundamental en la contabilidad de cualquier empresa en Chile, ya sea que estés en Santiago, Concepción, Valparaíso o cualquier rincón del país 🇨🇱. Es un reflejo de la situación financiera de tu emprendimiento, mostrando con transparencia y precisión cómo está compuesta tu empresa desde el punto de vista económico. Pensemos en ello como una fotografía financiera de tu negocio que refleja todo lo que tiene y lo que debe en un momento puntual, generalmente al cierre del año fiscal.
Algo importante a mencionar es que no todas las empresas llegan a tener un Balance… Si te preguntas de las razones, es dado qué cuando creas una empresa en Chile no siempre para estas es requisito u obligación de tener uno. Hay muchas empresas que deciden llevar una contabilidad completa, y para este tipo de empresas el Servicio de Impuestos Internos los obliga a cumplir con un balance. Pero hay empresas que deciden tener una contabilidad simplificada, y al este no ser requisito obligatorio, deja de hacerse.
En este documento contable se desglosa toda la información financiera hasta una fecha determinada, y se presenta de forma estructurada siguiendo la normativa chilena. Los tres pilares que componen el balance general son los Activos, que representan todo lo que tu negocio posee; los Pasivos, que son las obligaciones o deudas; y el Patrimonio, que refleja el valor neto de tu emprendimiento, siendo la diferencia entre los activos y pasivos.
Si estás pensando en cómo elaborar este informe, la verdad es que si bien puede parecer complejo al principio, con la guía correcta se transforma en un proceso más llevadero. En Chile, es fundamental tener claro este balance, no solo para entender la salud financiera de tu negocio, sino también para cumplir con las obligaciones ante el Servicio de Impuestos Internos y las municipalidades. Por ejemplo, si estás en el proceso de crear tu empresa o recién estás poniendo en marcha tu emprendimiento, el balance general se vuelve un aliado para entender dónde estás parado y qué decisiones tomar en adelante.
¿Cómo hacer un Balance General?
A continuación te vamos a enseñar que la base de este tipo de Balance es una ecuación. Esta ecuación será, en este artículo, “la ecuación” desde ahora. Así que, atento. Todo el paso a paso para generar un balance general, y todo lo que se viene de aquí a continuación tiene como base esta ecuación que te mencionamos.
La famosa ecuación
Bueno, la ecuación es como sigue:
Activos = Pasivos + Patrimonio
Si buscas a modo de resumen como es el proceso para calcular el balance, podríamos rápidamente mencionar: Calcula tus activos, que incluyen desde lo que tiene en caja hasta propiedades, vehículos y maquinarias. Por otro lado, calcula los pasivos (las deudas), ya sea a corto plazo como proveedores o a largo plazo como un crédito bancario. Calcula el patrimonio, que es el corazón del negocio, se muestra lo que realmente pertenece a los dueños o accionistas después de descontar deudas. Esto incluye el capital inicial, las utilidades retenidas y cualquier otro ingreso que no haya sido repartido. La suma de todo tus Activos debería ser equivalente a todos los pasivos y todo el patrimonio 🤝. Probablemente la imagen de a continuación explica bien como es el proceso:

El paso a paso para hacer un Balance General
Junta y Suma tus Activos Corrientes y Fijos
Los activos son ese capital con el que cuenta tu negocio o emprendimiento para mantenerse funcionando y generar ganancias. Ahora bien, para tener todo en orden, es esencial clasificarlos de manera adecuada. Vamos a ver cómo hacerlo lo más fácil posible y así entender el Balance general:
Activos Corrientes o Circulantes:
Estos son los activos que, si te pilla el apuro, puedes convertir rápidamente en efectivo 💸💸💸. Aquí entran la caja, que es el dinero en efectivo y cheques sin depositar; las cuentas bancarias, que es lo que tienes guardado en el banco; las cuentas por cobrar, que son esos montos que están pendientes por las ventas a crédito o préstamos hechos a terceros; y los inventarios, que son todo lo que tienes almacenado y listo para vender, desde materias primas hasta productos terminados.
Activos Fijos:
Esos bienes que no se mueven tan fácilmente y que son fundamentales para que tu negocio o pyme funcione. Hablamos de las maquinarias y equipos, los vehículos para moverse o repartir, el mobiliario de oficina donde te sientas a hacer tus cuentas, y claro, inmuebles 🏢 y terrenos. Estos activos tienen un valor determinado, que puede ser el comercial o el de compra si son recientes. Y ojo, no olvides que se van depreciando con el tiempo debido al desgaste. ¿Complicado? Si, sabemos que no todas las empresas tienen taaantos activos fijos, pero es importante mencionarlos.
Otros Activos:
A veces hay cosas que no caben en las categorías anteriores, pero que también cuentan. Por ejemplo, esos gastos que ya pagaste pero que todavía no usas, o las patentes que le dan un plus a tu negocio.
Al clasificar y entender bien tus activos, te aseguras de tener una imagen clara de tu situación financiera y de estar listo para cualquier movimiento o decisión en tu emprendimiento. Bueno, teniéndolos ya calculados individualmente, debes sumarlos y con esto sabrás cuánto realmente tienes.
Junta y Suma tus Pasivos Corrientes y Fijos
En la vida de un negocio, no todo es ganancia y activos; también hay deudas y obligaciones que atender, y en el mundo contable, a eso le llamamos “pasivos”. Son parte del balance general. Es fundamental entenderlos y gestionarlos bien para que tu emprendimiento siga adelante y no te pille la micro.
Pasivos Corrientes:
Son esas deudas que te persiguen a corto plazo, las que debes cubrir en menos de un año. Aquí entran las obligaciones bancarias, como esos créditos que tomaste pensando en la expansión del negocio. También están las cuentas con proveedores, esos partners que te surten de lo necesario para operar 🧻. Los anticipos de clientes, esos abonos que te hicieron por servicios o productos aún no entregados, y claro, los sobregiros y cuentas por pagar a otros acreedores. Ah, y no olvidemos los impuestos por pagar y las prestaciones que le debes a tu equipo de trabajo. 😨
Pasivos a Largo Plazo (Fijo):
Estas son las deudas que te dan un respiro más largo, las que puedes pagar en más de un año. Aquí hablamos de créditos bancarios de largo tiro, deudas con comercializadoras si es que adquiriste algún vehículo o maquinaria a crédito y cualquier deuda que hayas contraído y que te vayas a demorar mucho en pagar.
Otros Pasivos:
Son esos que no calzan ni como corrientes ni como de largo plazo. Un ejemplo clásico sería el arriendo que ya cobraste, pero que aún no has prestado el servicio.
Y, al final del día, para tener claridad de en qué estamos parados, suma los tres tipos de pasivos. Con esto tendrás una visión clara de tus deudas totales y podrás tomar decisiones informadas para tu negocio o emprendimiento.
Registra todo tu Capital
Dentro del mundo de la contabilidad y las finanzas, el patrimonio es esa columna vertebral que sostiene tu emprendimiento o negocio. A veces puede que escuches hablar del “capital” o “patrimonio” o “fondos propios”, pero no te enredes, estamos hablando de lo mismo. Es esencial que tengas claridad sobre este punto, ya que refleja la salud financiera de tu empresa dentro del Balance General.
Capital:
Pensemos en este como ese empujón inicial que diste al comienzo, la plata con la que te lanzaste a la piscina cuando decidiste empezar tu negocio. Es la inversión que hiciste, junto a tus socios si los tienes, para que tu empresa comenzara a funcionar.
Utilidades Retenidas:
Estas son las lucas que tu negocio ha ido generando y que, en lugar de repartirlas, decidiste reinvertirlas en la empresa. Es como si en lugar de gastarte el aguinaldo, decidieras guardarlo para algo más grande en el futuro 😉.
Utilidades del Período Anterior:
Aquí hablamos de las ganancias que tu emprendimiento generó en el ciclo anterior. Si has estado llevando tus cuentas al día, estos valores deberían coincidir con los de tu último informe de pérdidas y ganancias.
Reserva Legal:
Acá en Chile, la ley nos pide que guardemos una parte de las utilidades. Es como ese ahorro obligatorio que hacemos para futuras inversiones o para cubrirnos en días más nublados.
La suma de estos 4 componentes te dará una visión clara del patrimonio de tu empresa. Con estos datos en mano, estarás listo para tomar decisiones informadas, seguir creciendo y haciendo de tu negocio un verdadero pilar en el mercado chileno.
Suma Pasivos y Patrimonio, y aplica la ecuación
Las dos últimas etapas del proceso para hacer un Balance General son Sumar todos los pasivos con el patrimonio, y aplicar la ecuación que te hemos mencionado más arriba.
Es sencillo: una vez que ya tienes en la mira todos tus activos, pasivos y patrimonios, toca sumarlos. Así, por categoría, te haces una idea del valor total de cada uno. Es como cuando juntas todas las monedas del chanchito al final del mes para ver qué te alcanza.
Uno puede jugar un poco con la ecuación o la “formula”:
Activo = Pasivo + Patrimonio.
O también: Activo – Pasivo = Patrimonio.
O tambipen: Activo – Patrimonio = Pasivo.
Entonces, cuando sumas el valor total de los activos, eso tiene que ser igual a lo que sacas si sumas los pasivos y el patrimonio. Si todo está en orden, si tienes un negocio equilibrado y andas por buen camino, los montos de todos tus activos deberían ser equivalentes a todos los pasivos y tu patrimonio.
Palabras Finales
Al final, una vez que has recopilado toda la información, números y cifras, simplemente debes juntarlos en un excel y elegir algún tipo de formato para presentarlos.
Espero de todo corazón que te haya servido todo este artículo para entender qué es un Balance General y como debes hacer uno. Nosotros en Denegocios.cl utilizamos un programa de contabilidad que nos “automatiza” gran parte de este proceso, que no es para nada fácil de hacer… es laborioso. Si estás buscando ayuda en este proceso, te dejo cordialmente invitado a que nos contactes o escribas. Tenemos un excelente servicio de contabilidad mensual y de contabilidad anual que te podrá servir para este tipo de cosas. Te dejo el link de nuestro servicio de contabilidad. Espero que estés bien, y mucho éxito en tu negocio.
Asesor Senior con 9 años de experiencia ayudando a Emprendedores en Chile.
Actualmente escribo código para diferentes proyectos de desarrollo web y aplicaciones.